martes, noviembre 14, 2006
Un día, por encargo de su abuelita, Adela fue al bosque en busca de setas para la comida. Encontró unas muy bellas, grandes y de hermosos colores llenó con ellas su cestillo.
-Mira abuelita -dijo al llegar a casa-, he traído las más hermosas...
¡mira qué bonito es su color escarlata!
Había otras más arrugadas, pero las he dejado.
-Hija mía -repuso la anciana- esas arrugadas son las que yo siempre he recogido. Te has dejado guiar por las y apariencias engañosas y has traído a casa hongos que contienen veneno. Si los comiéramos, enfermaríamos; quizás algo peor...
Adela comprendió entonces que no debía dejarse guiar por el bello aspecto de las cosas, que a veces ocultan un mal desconocido.
lunes, julio 31, 2006
La sinceridad no es algo que debemos esperar de los demás, es un valor que debemos vivir para tener amigos, para ser dignos de confianza…
Para ser sinceros debemos procurar decir siempre la verdad, esto parece muy sencillo, pero muchas veces cuesta más de lo que se cree. Se utilizan las ‘’mentiras piadosas’’ para ocultar cualquier cosa que para nosotros es una tontería, pero que en realidad a la persona que mientes haces daño, y esta pequeña mentira que en un principio nos es nada se va haciendo más y más grande hasta que la verdad se acaba sabiendo y sorprendiendo a quien mientes.
La sinceridad no sólo se ve en las palabras, sino que también se demuestra por medio de nuestras actitudes.
Cuando se aparenta lo que no somos (en la edad, trabajo, amistad…) se tiende a aparentar lo que no se es (más joven, inteligente, educados…) Si se descubre la gran mentira que nos han hecho creer se nos viene a la memoria el refrán: ‘’Dime de que presumes… y te diré de que careces’’ y entonces se produce una gran desilusión ya que se pierden las esperanzas de lo que la persona no es en realidad.
También indicar que ‘’decir’’ siempre la verdad con palabras es una parte de la sinceridad, pero también hay que ‘’actuar’’ acorde con la verdad.
Para ser sincero se necesita tener mucho ‘’tacto’’ y esto significa que cuando debemos decirle a una persona la verdad de lo que pensamos y esta verdad la incomoda debemos utilizar las palabras, las expresiones correctas ya que el primer propósito es ‘’ayudar’’ a esa persona, y esto es necesario para que la persona escuché y vea que lo que se la dice va con buenas intenciones y sin ánimo de ofenderla.
La sinceridad también requiere valor ya que a la hora de decir la verdad a un amigo o a una amiga por ejemplo, el no decir la verdad no se puede justificar con no decirlo con el perder una buena amistad o por el concepto que se tiene de la persona.
La persona sincera siempre dice la verdad, en todo momento, aunque le cueste, sin temor al qué dirán. Ya que vernos sorprendidos mientras mentimos es más vergonzoso aún.
Al ser sinceros aseguramos nuestras amistades, somos más honestos con los demás y a la vez con nosotros mismos, convirtiéndonos en personas dignas de confianza por la autenticidad que hay en nuestra forma de comportarnos y nuestras palabras.
A medida que nos vamos haciendo más mayores, la sinceridad debe ir en aumento y debe convertirse en un elemento básico para vivir nuestra vida con auténtica plenitud y sinceridad.
viernes, julio 28, 2006
- Me estoy fabricando un precioso anillo. He conseguido uno de los mejores diamantes posibles. Quiero guardar oculto dentro del anillo algún mensaje que pueda ayudarme en momentos de desesperación total, y que ayude a mis herederos, y a los herederos de mis herederos, para siempre. Tiene que ser un mensaje pequeño, de manera que quepa debajo del diamante del anillo.
Todos quienes escucharon eran sabios, grandes eruditos; podrían haber escrito grandes tratados, pero darle un mensaje de no más de dos o tres palabras que le pudieran ayudar en momentos de desesperación total...
Pensaron, buscaron en sus libros, pero no podían encontrar nada.
El rey tenía un anciano sirviente que también había sido sirviente de su padre. La madre del rey murió pronto y este sirviente cuidó de él, por tanto, lo trataba como si fuera de la familia. El rey sentía un inmenso respeto por el anciano, de modo que también lo consultó. Y éste le dijo:
-No soy un sabio, ni un erudito, ni un académico, pero conozco el mensaje. Durante mi larga vida en palacio, me he encontrado con todo tipo de gente, y en una ocasión me encontré con un místico. Era invitado de tu padre y yo estuve a su servicio. Cuando se iba, como gesto de agradecimiento, me dio este mensaje –el anciano lo escribió en un diminuto papel, lo dobló y se lo dio al rey-. Pero no lo leas –le dijo- manténlo escondido en el anillo. Abrelo sólo cuando todo lo demás haya fracasado, cuando no encuentres salida a la situación-
Ese momento no tardó en llegar. El país fue invadido y el rey perdió el reino. Estaba huyendo en su caballo para salvar la vida y sus enemigos lo perseguían. Estaba solo y los perseguidores eran numerosos. Llegó a un lugar donde el camino se acababa, no había salida: enfrente había un precipicio y un profundo valle; caer por él sería el fin. Y no podía volver porque el enemigo le cerraba el camino. Ya podía escuchar el trotar de los caballos. No podía seguir hacia delante y no había ningún otro camino...
De repente, se acordó del anillo. Lo abrió, sacó el papel y allí encontró un pequeño mensaje tremendamente valioso:
Simplemente decía “ESTO TAMBIEN PASARA”.
Mientras leía “esto también pasará” sintió que se cernía sobre él un gran silencio. Los enemigos que le perseguían debían haberse perdido en el bosque, o debían haberse equivocado de camino, pero lo cierto es que poco a poco dejó de escuchar el trote de los caballos.
El rey se sentía profundamente agradecido al sirviente y al místico desconocido. Aquellas palabras habían resultado milagrosas. Dobló el papel, volvió a ponerlo en el anillo, reunió a sus ejércitos y reconquistó el reino. Y el día que entraba de nuevo victorioso en la capital hubo una gran celebración con música, bailes... y él se sentía muy orgulloso de sí mismo.
El anciano estaba a su lado en el carro y le dijo:
-Este momento también es adecuado: vuelve a mirar el mensaje.
-¿Qué quieres decir? –preguntó el rey-. Ahora estoy victorioso, la gente celebra mi vuelta, no estoy desesperado, no me encuentro en una situación sin salida.
-Escucha –dijo el anciano-: este mensaje no es sólo para situaciones desesperadas; también es para situaciones placenteras. No es sólo para cuando estás derrotado; también es para cuando te sientes victorioso. No es sólo para cuando eres el último; también es para cuando eres el primero.
El rey abrió el anillo y leyó el mensaje: “Esto también pasará”, y nuevamente sintió la misma paz, el mismo silencio, en medio de la muchedumbre que celebraba y bailaba, pero el orgullo, el ego, había desaparecido. El rey pudo terminar de comprender el mensaje. Se había iluminado.
Entonces el anciano le dijo:
-Recuerda que todo pasa. Ninguna cosa ni ninguna emoción son permanentes. Como el día y la noche, hay momentos de alegría y momentos de tristeza. Acéptalos como parte de la dualidad de la naturaleza porque son la naturaleza misma de las cosas.
miércoles, julio 26, 2006
Una gran mariposa multicolor y vagabunda volaba una noche en la oscuridad, cuando vió a lo lejos una lucecita... Inmediatamente torció en aquella dirección y, cuando estuvo cerca de la llama, se puso a girar ágilmente en torno de ella, mirandola maravillada. !Qué hermosa era!.
No contenta con admirarla, la mariposa comenzó a pensar que con ella podía hacer lo mismo que con las flores olorosas.
Se alejó, dió la vuelta y dirigiendo valerosamente su vuelo hacia la llama, pasó volando por encima de ella.. ¡Se encontró aturdida al pie de la luz! Asombrada se dio cuenta de que le faltaba una pata y...¡las puntas de sus alas se le habían chamuscado!
-¿Qué me ha sucedido? - se preguntó, sin encontrar explicación.
De ningún modo podía admitir que de una cosa tan bella como una llama pudiese venir ningún daño; así que, después de haber recuperado algo las fuerzas, de un aletazo emprendió el vuelo.
Revoloteó unos instantes y de nuevo se dirigió hacia la llama para posársele encima. Pero enseguida cayó abrasada, en el aceite que alimentaba la llama.
-Maldita luz- murmuró la mariposa al borde de la muerte-.
Creí encontrar en tí la felicidad, y en lugar de ella he hallado la muerte. Lloro por mi loco deseo, porque te he conocido demasiado tarde, y para daño mío, tu naturaleza peligrosa.
-!Pobre mariposa! -respondió la luz- .Yo no soy el sol, como ingenua creíste. Yo sólo soy una llama y el que no sabe usarme con prudencia se quema.
Pregunta:
Y tú?... ¿Eres llama? ¿Eres mariposa?, seguramente que ya te has quemado alguna vez ¿verdad?
Nunca olvides que las cosas que te atraen, pueden hacerte daño, son las cosas que no te atraen las que muchas veces te pueden hacer feliz.
Dime .piensa... ¿Eres mariposa? ¿Eres llama? ¿Qué eres?
viernes, julio 21, 2006
En la antigua Grecia, Sócrates fue famoso por su sabiduría y por el gran respeto que profesaba a todos.
Un día un conocido se encontró con el gran filósofo y le dijo:
- ¿Sabes lo que escuché acerca de tu amigo?
- Espera un minuto -replico Sócrates-. Antes de decirme nada quisiera que pasaras un pequeño examen. Yo lo llamo el examen del triple filtro.
- ¿Triple filtro?
- Correcto -continuó Sócrates-. Antes de que me hables sobre mi amigo, puede ser una buena idea filtrar tres veces lo que vas a decir.
Es por eso que lo llamo el examen del triple filtro.
El primer filtro es la verdad. ¿Estás absolutamente seguro de que lo que vas a decirme es cierto?
- No -dijo el hombre-, realmente sólo escuché sobre eso y..
- Bien -dijo Sócrates-, entonces realmente no sabes si es cierto o no.
Ahora permíteme aplicar el segundo filtro, el filtro de la bondad . ¿Es algo bueno lo que vas a decirme de mi amigo?
- No, por el contrario...
- Entonces, deseas decirme algo malo sobre él, pero no estás seguro de que sea cierto.
Pero podría querer escucharlo porque queda un filtro: el filtro de la utilidad . ¿Me servirá de algo saber lo que vas a decirme de mi amigo?
- No, la verdad que no.
- Bien -concluyó Sócrates-, si lo que deseas decirme no es cierto, ni bueno, e incluso no me es útil, ¿para qué querría yo saberlo?
Usa este triple filtro cada vez que oigas comentarios sobre alguno de tus amigos(as) cercanos(as) y queridos(as).
La amistad es algo invaluable, nunca pierdas a un(a) amigo por algún mal entendido o comentario sin fundamento.
martes, mayo 23, 2006
Pensar con la cabeza significa que debes guiar a tú corazón en la elección de esa persona:
- que te haga clic en el corazón cuando lo veas,
- cuando lo escuches,
- que quieras detener el tiempo cuando estás con él.
- Piensa con la cabeza si reúne las características de un buen padre para tus hijos, un buen esposo para ti ...que te ame, que te atienda,
- que se proyecte y trabaje por el bienestar de su familia.
- Te invita ahorrar y esté dispuesto a ahorrar contigo
- Te integra a su familia de sangre
- Hay confianza, no hay secretos
- No hay prisa
- La felicidad es tranquila desde el principio
- Disimulas las diferencias de carácter obvias desde el primer momento, los defectos, etc. porque no quieres estropear el rápido palpitar de tú corazón.
- Tú relación proyecta pasión pero no paz, proyecta momentos felices a corto plazo pero no seguridad para toda la vida.Cada quien maneja sus cuentas por separado
- Hay amigos que no conoces pero no quieres estropear la felicidad del momento haciendo preguntas tontas
- Tratas de no invadir su espacio personal para no estropear lo que siente el bendito corazón, ese espacio personal puede significar el otro yo
Cuando piensas con el corazón llorarás el resto de tú vida. Corres el riesgo de ser madre soltera, mujer divorciada con n... cantidad de hijos pidiendo caridad para seguir adelante, divorciada prostituida en la calle por que el dolor no te dejó recuperarte etc.........
Cuando piensas con la cabeza tendrás tiempo para detenerte y decirle a Dios “Es lo mejor que me ha pasado en mi vida” fue mi mejor elección.
En este tema no hay expertos, hay experiencias escritas con lágrimas de sangre. Hay pruebas superadas y vamos a la siguiente.
Es como los desastres naturales, solo predicciones de lo que puede ocurrir, pero que si tomas precauciones a lo mejor no sales afectado.....
martes, mayo 16, 2006
A un grupo de estudiantes de escuela primaria se les pidio que listaran lo que ellos pensaban que eran las "7 maravillas del Mundo moderno o actuales" A pesar de ciertas diferencias, los siguientes fueron los que mas votos recibieron:
1. Las piramides de Egipto
2. El Tai Mahal
3. El Gran Cañon de Colorado
4. El canal de Panama
5. El edificio Empire State
6. La Basilica de San Pedro
7. La gran Muralla China.
Mientras contaba los votos, la maestra noto que habia una niña que no habia terminado de listar sus sugerencias.
Asi que le pregunto si estaba teniendo problemas con su lista, a los que la niña respondio : "Si un poquito. No puedo terminar de decidirme pues hay muchas cosas."
La maestra entonces le dijo: "Bueno, leenos los que tienes hasta ahora y a lo mejor te podemos ayudar".
L a niña lo penso un instante, pero luego leyo: "Yo pienso que las sietes maravillas del mundo" son:
1. Poder ver ....
2. Poder oir ....
3. Poder tocar ...
4. Poder probar ...
5. Poder sentir ...
6. Poder reir ...
7. Y poder amar.
El salon se silencio a tal punto que si se hubiera caido un alfiler, se hubiera escuchado.
Las cosas simples y ordinarias y que nosotros tomamos como cajoneras, son sencillamente maravillosas!!!
Un recordatorio muy respetuoso:
Las cosas mas preciadasde la vida, no se pueden construir con la mano ni se pueden comprar con el dinero.
martes, mayo 09, 2006
Cuando leas a un escritor
primero separa el texto de su retrato
busca en entrelineas a la ex –esposa
al amor de adolescencia, a la hija no existente
seguramente en sus versos encuentres sus divorcios
Cuando veas la foto del escritor piensa en Robinsón y su isla
evoca la soledad del campanario de Notre-Dame
o a un policía dormido en su patrulla
si quieres buscar su dirección
búscala en la lista de exiliados en un país lejano
sal corriendo por las calles en busca de un teléfono publico
y pregúntale al operador que si lo conoce
si contesta que no, es que no existe
Cuando quieras ir a su casa
lleva una botella de vino como plato fuerte
un libro de cuentos y dos de poesía
un cobertor y cerillos para prender la hoguera
pregúntale la hora en que cenaran
y quédate en ropa interior mientras el trata de vestirse
el escritor siempre anda desnudo aunque no lo parezca
Cuando llegue el momento de pagar por su trabajo
nunca le des monedas, dale un boleto para irse lejos
o en el mejor de los casos págale con tu cuerpo y tus labios
Cuando mires los ojos del escritor no busques
solo encuentra su angustia y mátala.
pues si ella te encuentra primero te ahogara lentamente
entre sus suicidios repetidos a horas no adecuadas.
si el escritor te sigue se indiferente con sus vigilias y espéralo en la cama,
el querrá que leas algo de moustros antes de dormir
si aun así decides dormir junto a él, abrázalo, colócalo entre tu pecho
y cántale una canción para dormir elefantes
si despiertas a media noche desliza tu lengua por su cuerpo
enreda tus dedos en su cabello para que su lengua encuentre tu verso
destila su semen, embotella su saliva y libera sus sueños
el escritor vive amando, camina amando, duerme escribiendo
en cuerpos noctámbulos con fecha de caducidad.
Si quieres hablarle escríbele cartas,
deja el café tibio en la mesa por la mañana
regálale margaritas mientras se baña
dile que lo odias como odias ir al mercado
dile que lo amas como amas el insomnio de su mano
pues el escritor no habla, escribe lo que ama
libera su miedos entre puntos y comas
el escritor escribe y te escribe a ti
mimetizando tu ser con la historia,
con el personaje que menos se parece a ti
así puede pintarte el pelo, cambiarte de nombre
desvestirte, amarte y puede repetirlo mil veces
Si decides amar a un escritor no lo ames tanto
pues siempre en sus textos amara mas al personaje
que la mano que acompaña sus tardes soleadas
ámalo como si mañana cambiaras de libro
y cambiaras de historia, el escritor se escribe así mismo cada día
Cuando el escritor habla de verdades dice la mitad
y la otra mitad lo omite por miedo a perder el autobús
la verdad en momentos se vuelve su lucha
y por otros su esclavitud no fecunda
cuando escuches verdades guárdalas
colócalas en la cocina, en la sala, en el dormitorio
plancha con ellas las sabanas de tu cama
pues será la única manera que puedas dormir con ellas
sin tener que preguntárselas
Cuando busques el corazón de un escritor
toma una linterna, mete tu mano en la obscuridad de su mirada
camina despacio pues hay muchas trampas
agujas que apuntan contra tu alma
muros que se colapsan a destiempo
piedras de dudas que ruedan por pasajes secretos
cierra bien los ojos y abre bien el pecho
la única manera de encontrarlo es dejar el tuyo expuesto
pero si lo encuentras no te llenes de miedo
vuélvete invencible y atácalo con valor férreo
Si sus miradas se encuentran
vuélvete Medusa o Perseo, decapítalo o vuélvelo piedra
alguno de los dos caerá por su reflejo
si en esa mirada encuentras el abrazo sutil de su cuerpo
pídele sus manos para que no te haga daño con ello
desangra su lengua para que pierda veneno
sujétate a su pecho y aguarda el momento
y cuando tu mirada sea devorada por su gesto
conviértete en letra, acento, punto o supuesto
estalla en risa y cuando escuches su eco
el escritor ríe por dentro pensando que no lo estas viendo
el escritor ríe cuando llora, ríe cuando se enamora,
el escritor piensa en la felicidad
la felicidad sin fama, sin cenas protocolarias, sin representantes
sin salarios, ni turnos laborales, sin patrones y sindicatos
el escritor busca la protagonista del próximo soneto
de la novela sin final, busca sin buscar
escribe leyendo mil renglones, sueña, mira
pero si lo miras, lo hueles, lo tocas
duermes con el y al despertar su texto queda en la orilla de la cama
y en la almohada que a tu lado encuentra el alba
el escritor se ríe en tu pecho agitado
no habrá títulos sin recamara, besos con editorial
tendrás la llave para abrir cantinas analfabetas
oficinas llenas de renglones vacíos que te esperan
con tus guerras y fantasmas, con tus flores y tus abismos
con tus dientes y tus palabras, con tus silencios y tu casa
escribiendo en el que escribe las ansias, las glorias de la obra.
(Del un libro futuro, inedito, escrito e inconcluso aun no terminado)
Tomado del blog de Antonio Araiza Aullido
viernes, mayo 05, 2006
Un hombre, su caballo y su perro iban por una carretera.
Cuando pasaban cerca de un árbol enorme cayó un rayo y los tres murieron fulminados.
Pero el hombre no se dio cuenta de que ya había abandonado este mundo, y prosiguió su camino con sus dos animales (a veces los muertos tardan un cierto tiempo antes de ser conscientes de su nueva condición...)
La carretera era muy larga, colina arriba, el sol era muy intenso, y ellos estaban sudados y sedientos.
En una curva del camino vieron un magnifico portal de mármol, que conducía a una plaza pavimentada con adoquines de oro, en el centro de la cual había una fuente de donde manaba agua cristalina.
El caminante se dirigió al hombre que custodiaba la entrada.
- Buenos días.
- Buenos días – Respondió el guardián.-
- ¿Como se llama este lugar tan bonito?
- Esto es el Cielo.
- Que bien que hayamos llegado al Cielo, porque estamos sedientos.
- Usted puede entrar y beber tanta agua como quiera. Y el guardián señaló la fuente.
- Pero mi caballo y mi perro también tienen sed...
- Lo siento mucho - Dijo el guardián- pero aquí no se permite la entrada a los animales.
El hombre se levantó con gran disgusto, puesto que tenía muchísima sed, pero no pensaba beber solo; dio las gracias al guardián y siguió adelante.
Después de caminar un buen rato cuesta arriba, ya exhaustos, llegaron a otro sitio, cuya entrada estaba marcada por una puertecita vieja que daba a un camino de tierra rodeado de árboles.
A la sombra de uno de los árboles había un hombre echado, con la cabeza cubierta por un sombrero. Posiblemente dormía.
- Buenos días - dijo el caminante.
El hombre respondió con un gesto de la cabeza.
- Tenemos mucha sed, mi caballo, mi perro y yo.
- Hay una fuente entre aquellas rocas - dijo el hombre, indicando el lugar.
- Podéis beber tanta agua como queráis.
El hombre, el caballo y el perro fueron a la fuente y calmaron su sed.
El caminante volvió atrás para dar las gracias al hombre.
- Podéis volver siempre que queráis - le respondió-
- A propósito ¿Como se llama este lugar?
- Cielo.-
- ¿El Cielo? ¿Si? Pero si el guardián del portal de mármol me ha dicho que aquello era el Cielo!-
- Aquello no era el Cielo, era el Infierno, contestó el guardián.
El caminante quedó perplejo.
- ¡Deberíais prohibir que utilicen vuestro nombre! ¡Esta información falsa debe de provocar grandes confusiones!
- ¡De ninguna manera! En realidad, nos hacen un gran favor. Porque alli se quedan todos los que son capaces de abandonar a sus mejores amigos...
Autor: Paulo Coelho
viernes, marzo 17, 2006
Un joven de vida espiritual fue a una reunión de estudio de la Biblia en la residencia de un matrimonio amigo. Era noche de jueves.
El matrimonio dividió el estudio entre oír a Dios y obedecer la palabra del Señor.
El joven no podía dejar de querer saber si "Dios aun habla con las personas".
Después del estudio, el salió para tomar un café con los amigos que estaban en la reunión familiar, y discutían un poco más sobre el mensaje de esa noche.
De formas diversas ellos hablaban cómo Dios había conducido sus vidas de maneras tan diferentes.
Eran aproximadamente las 22 horas cuando el joven se despidió de sus amigos y comenzó a dirigirse a su casa.
Sentado en su automóvil, comenzó a pedir: "Dios, si aún hablas con las personas, habla conmigo. Yo te escuchare. Haré todo para obedecerte"
Mientras conducía por la avenida principal de la ciudad, tuvo un pensamiento muy extraño, como si una voz hablase dentro de su cabeza:
"Para y compra un litro de leche".
El movió su cabeza y dijo en alto: "Dios, ¿eres tú, Señor?".
No obtuvo respuesta y continuó dirigiéndose para su casa.
Sin embargo, nuevamente, surgió el pensamiento: "Compra un litro de leche".
El joven pensó en el pasaje de la Biblia que habla de Samuel y cómo él no reconoció la voz de Dios, y cómo Dios habló con Samuel.
¡Muy bien, Dios!
En caso de ser el Señor, voy a comprar la leche.
Esto no parece ser una prueba de obediencia muy difícil. Total, uno podrá también usar la leche.
Así que paró, compró la leche y reinició su camino a casa. Cuando pasaba por la séptima avenida, nuevamente sintió un pedido:
"Gira en aquella calle".
Esto es una locura, pensó y pasó de largo el retorno. Nuevamente sintió que debería haber girado en la séptima avenida.
En el siguiente retorno, el giró y se dirigió por la séptima avenida.
Medio bromeando, dijo en voz alta: "Muy bien, Dios. Lo haré".
Siguió avanzando por algunas cuadras cuando de repente sintió que debía parar. Se detuvo y miró a su alrededor.
Era un área mixta comercial y residencial. No era la mejor área, más también no era la peor de la vecindad.
Los establecimientos estaban cerrados y la mayoría de las casas estaban a oscuras, como si las personas ya se hubiesen ido a dormir, excepto una del otro lado de la calle y que estaba cerca.
Nuevamente, sintió algo, "Ve y dale la leche a las personas que están en aquella casa del otro lado de la calle".
El joven miró la casa.
Comenzó a abrir la puerta del coche, pero se volvió a sentar.
"¡Señor, esto es una locura!" ¿Cómo puedo ir a una casa extraña en medio de la noche?".
Una vez más, sintió que debería ir a dar la leche.
Finalmente, abrió la puerta,"Muy bien, Dios, si eres el Señor, iré y entregaré la leche a aquellas personas. Si el Señor quiere que yo parezca un loco, muy bien. Yo quiero ser obediente.
Pienso que esto va a contar para algo; sin embargo, si ellos no responden inmediatamente, me iré en el mismo acto.
Atravesó la calle y toco la campanilla. Pudo oír un barullo viniendo desde dentro, parecido al llanto de una criatura. La voz de un hombre sonó alto:
¿Quien está ahí? ¿Que quiere?.
La puerta se abrió antes que el joven pudiese huir. De pie, estaba un hombre vestido de jeans y camiseta.
Tenía un olor extraño y no parecía feliz de ver a un desconocido de pie en su solera. "¿Que pasa?"
El joven le entrego la botella de leche. "Compre esto para ustedes".
El hombre tomó la leche y corrió adentro hablando alto. Después, una mujer pasó por el corredor cargando la leche en dirección a la cocina. El hombre la seguía, sosteniendo en brazos una criatura que lloraba.
Lagrimas corrían por el rostro del hombre y luego comenzó a hablar, medio sollozando: "Nosotros oramos". Tenemos muchas cuentas que pagar este mes y nuestro dinero se había acabado.
No teníamos más leche para nuestro bebe. Apenas ore le pedí a Dios que me mostrase una manera de conseguir leche.
Su esposa grito desde la cocina: "Pedí a Dios que me mandara un ángel con un poco... " ¿Ud. es un ángel?
El joven tomó su cartera y sacó todo el dinero que había en ella y lo colocó en las manos del hombre.
Se dio media vuelta y se fue a su vehículo, mientras las lágrimas corrían por sus mejillas.
El experimentó que Dios, todavía responde los pedidos de los justos.